La Comisión Europea ha acogido gratamente el acuerdo político sobre la primera Ley de Resiliencia Cibernética (CRA) alcanzado entre el Parlamento y el Consejo. Esta norma tendrá como objetivo aumentar la seguridad de los productos digitales en la Unión Europea. Las tres instituciones debatieron antes del acuerdo final (i) el alcance de los productos afectados; (ii) el requisito de informar a la Agencia Europea de Ciberseguridad (ENISA) o a los equipos locales de respuesta a incidentes de seguridad informática (CSIRT) sobre dichos incidentes; (iii) la posibilidad de que los países de la UE reinviertan los ingresos de las sanciones en actividades de desarrollo de capacidades en ciberseguridad; y (iv) las exenciones de seguridad nacional.